Hay una nueva noticia sobre Cuba que ha alegrado al mundo. El VI Congreso del PCC propuso a la Asamblea Nacional que se limite el tiempo en los principales cargos del gobierno a dos períodos consecutivos de 5 años. El tiempo consecutivo que llevó Fidel en el poder fue una de las cosas más criticadas y, de hecho, a Raúl se lo cuentan sumando el suyo y el del hermano.
Aquí voy yo, con mi forma de pensar extraña y me pregunto:
Aquí voy yo, con mi forma de pensar extraña y me pregunto:
¿Acaso esa medida no es antidemocrática 100%?
¿Qué sentido democrático tiene prohibirle al pueblo mantener un líder en el poder si así lo quiere?
Hasta donde conozco, todos los países que tienen leyes como estas, también tienen leyes que imponen votaciones en esos períodos. Se infiere de la misma propuesta que esos cargos serán sometidos a votación cada 5 años. Si el pueblo quiere cambiar el líder, solo tiene que no votar por él y ya, resuelto, pero si por el contrario desea mantenerlo, entonces resulta que la ley se lo prohíbe. ¿No es eso antidemocrático?
La parte que más me gusta del cuento es que esta medida es considerada un avance democrático para Cuba. Claro, en este mundo nuestro, cualquier paso que se dé semejante a los implementados por los amos de los medios, está aprobado, sin gastar una neurona siquiera en evaluarlo.
Solo espero que si a alguien en el mundo se le ocurre autorizar cárceles extrajudiciales y torturas como hace Estados Unidos en Guantánamo, no sea aplaudido por la prensa mundial y tomado como un paso hacia la democracia.
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